El cuarto mes del año ha concluido con una tasa de ocupación hotelera del 75,9%, una cifra que, si bien mejora la del mes precedente en 4,9 puntos porcentuales, es 0,5 puntos inferior a la registrada en abril de 2022 y está también por debajo de la alcanzada en 2019 (78,4%). Por segunda vez en lo que va de año (sucedió también en febrero) el dato mensual no supera el registrado un año antes, si bien la diferencia no es muy significativa y dibuja un escenario de estabilidad.
La ciudad de Alicante ha registrado una tasa del 80,1%, mientras que la Playa de San Juan ha conseguido el mejor dato provincial, con un 92,0%. El resto de localidades ha alcanzado cifras dispares. El Campello se ha conformado con un 39,8%, Guardamar del Segura con un 56,0%, Jávea un 76,2%, Villajoyosa un 24,3%, Alcoy un 60,0%, Algorfa 64,1%, Mutxamel un 74,5%, Orihuela 69,6%, Sant Joan d’Alacant 78,0% y Villena un 33,5%.
La rentabilidad ha evolucionado positivamente, con unos ingresos por habitación disponible que crecen un 18,62% respecto al mismo mes del año anterior, una cifra que permite sortear el incremento de precios de la energía y otros suministros que se ha vivido en este periodo.
En cuanto al origen de la demanda, la provincia ha recibido en abril mayoritariamente turistas internacionales (61,0%) frente al los llegados de España (39,0%). De entre los primeros, destacan los llegados de Reino Unido (22,9%), seguidos de los procedentes de Noruega (7,6%), Irlanda (7,2%), Francia (5,9%), Suecia (5,6%) o Países Bajos (5,2%). De los de origen nacional, son destacables los llegados de la propia Comunitat Valenciana (27,2%), seguidos de cerca por los de la Comunidad de Madrid (26,1%). Siguen en importancia los procedentes de Cataluña (10,9%), Castilla La Mancha (6,7%), Región de Murcia (5,0%), Andalucía (4,4%) o Castilla y León (3,1%).
Las previsiones para mayo apuntan a una estabilidad de las cifras y se espera que el conjunto del mes se sitúe en términos parecidos a los del mismo mes del pasado año.
